En noviembre de 2014 un investigación periodística determinó que Angélica Rivera, la esposa del presidente de México, Enrique Peña Nieto, había adquirido una mansión valorada en más de 7 millones de dólares. El vendedor había sido uno de los principales contratistas del gobierno.
El escándalo sacudió el Palacio Nacional, sede del gobierno, y superó las fronteras para ser bautizado como el caso de la «Casa Blanca». Meses antes antes la revista Time había publicado en su portada a Peña Nieto como salvador de su país. A la sombra que opaca la administración del líder mexicano -por la desaparición forzada de 43 estudiantes- se le sumó el escándalo de la mansión.
En su discurso del 18 de julio de 2016, Peña Nieto pidió perdón al pueblo de México por el tema de la Casa Blanca. Uno de los autores de la investigación, el reportero Rafael Cabrera, trata de explicar el trasfondo de esa disculpa presidencial.
