Su pasión no es retratar a los más famosos personajes de Colombia, aunque sí lo haya hecho; sus entrañas vibran con las historias de la gente del común que transita por la calle. De 37 años, José Alejandro González es un fotógrafo que ha puesto todas las miradas y sus lentes a los trabajadores, campesinos, inmigrantes y minorías étnicas, pero también a la gente que ha cometido errores y ha terminado en las drogas o en la cárcel.
Su proyecto Todos somos buenos ha trascendido fronteras. Ha recorrido miles de kilómetros con su cámara para retratar esas historias que tanto le inspiran. Al revés de quienes van a buscar el sueño americano, José Alejandro viajó en autobús desde Nueva York hasta Bogotá, y capturó cientos de imágenes durante el periplo que le tomó casi cuatro meses.
La experiencia de este viaje y de otros que ha realizado, lo llevaron a concluir que Colombia ha volcado sus cámaras hacia los verdugos, pero ha olvidado a los campesinos y verdaderas víctimas que han tenido que poner los muertos en la guerra.
José Alejandro estudió cine en Barcelona y desde hace dos años regresó a Colombia con el empeño de continuar con el proyecto con el que busca mostrar el lado humano y bello de la gente ignorada que no ha tenido la oportunidad de ser reconocida por la discriminación y clasismo del país.
Su serie de historias puede verse en este enlace https://www.youtube.com/channel/UCvSP4kCPj043pAyYnoIRDOw
