Todo lo que alguna vez mostraron las películas, comenzó a ser moneda corriente entre las figuras públicas de la Argentina. Desde deportistas de elite hasta el Papa Francisco, cuando aún era Cardenal de Buenos Aires, fueron víctimas del «espionaje ilegal» utilizado por agencias de investigaciones ´paralelas´.
La AFI es la Agencia Federal de Inteligencia y en los últimos días pasó de ser el ente encargado de garantizar la investigación y la seguridad ante diferentes delitos, a ser vinculada con una red de espionaje Ilegal que puso en jaque la credibilidad del organismo.
HispanoPost dialogó con Lucas Manjon (Organización Social «La Alameda»), víctima de un inmenso grupo de figuras e instituciones que fueron escuchadas en los últimos meses. Manjon mostró preocupación por lo que puede llegar a ocurrir con la seguridad informática y las garantías constitucionales ante este tipo de episodios
«En la Argentina cualquier persona puede ser espiada, la AFI no garantiza nada y todo lo que se ´teje´ de forma paralela, tampoco. Las motivaciones son diferentes, pero lo que queda claro es que acá se montó una metodología de presión a través de este tipo de escuchas donde las influencias de un deportistas, los contactos de un cardenal o los movimientos de una organización social, pueden ser de sumo interés para quien manda a escuchar».
