La hiperinflación ocasionó el desprecio del bolívar

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    El gremio de los comerciantes en Venezuela está representando por el Consejo Nacional del Comercio y los Servicio (conocido comúnmente por sus siglas Consecomercio). Sin duda es el gremio empresarial del país que suma más mujeres al frente de la presidencia. La primera fue Albis Muñoz a finales de los años 90, luego Cipriana Ramos y su actual titular, María Carolina Uzcátegui, es la tercera mujer en ocupar esta posición.

    Nació en Los Andes, se presenta en sus redes sociales como venezolana, Madre, demócrata, empresaria, gremialista y fiel adicta a la libertad.

    Señala que el sector comercial ha sido el principal afectado por los apagones que han ocurrido en toda Venezuela desde el pasado 7 de marzo; y a eso agrega los saqueos que se han dado en 10 estados, resaltando el caso de la región del Zulia, y en específico de la ciudad de Maracaibo, donde las autoridades –comenzando por el gobernado Omar Prieto- hicieron caso omiso de los actos violentos.

    Señala que por cada día inactividad comercial se dejan de percibir 200 millones de dólares, que los saqueos en el Zulia costaron 75 millones de dólares, sólo por daño de instalaciones y sin sumar las mercancías que se robaron. Al final, menciona que el sólo primer apagón le costó a Venezuela más de 1.000 millones dólares.

    A esto añade que los comercios deben lidiar con las fiscalizaciones e imposiciones del Seniat y los cambios constantes de precios debido a la hiperinflación y al manejo contable con diferentes divisas porque después de los apagones –debido a la inexistencia de bolívares y las fallas con los puntos de venta- se masificaron las transacciones en efectivo con dólar, peso colombiano o real brasileño.

    “Una característica de los procesos inflacionarios es el desprecio por la moneda local al entenderse que no tiene ningún valor”, comenta la presidenta de Consecomercio.  “No obstante, no somos una economía dolarizada porque la mayor parte de los trabajadores no perciben sus salarios en moneda extranjera y la estructura de costos de la empresas están expresadas en dólares, sobre todo si tiene un producto que mayoritariamente tiene componente nacional”, agrega.

    Pese a la situación que afronta Venezuela, María Carolina Uzcátegui habla de resiliencia y se entusiasma del optimismo que le muestran sus colegas sobre todo en el interior del país.