Los taxistas privados de La Habana exigen un cambio de la situación actual, donde se han establecido nuevas rutas que han cambiado las formas de pago, las cuales consideran injustas debido a la relación entre la distancia y el precio.
En el pasado, existían dos precios establecidos, de 10 y 20 pesos, sustituidos en la actualidad por cinco nuevas rutas, que varían su precio en función de la ruta, y donde la más barata cuesta 5, y la más cara, 25.
Los conductores de los almendrones, como se denomina a los coches antiguos en La Habana, han pedido al gobierno que les ayude, bien reestableciendo los precios y las rutas anteriores, o bien ofreciéndoles descuento en piezas mecánicas o combustible.
