Las vías de Caracas estuvieron muy transitadas el viernes 29 de noviembre, los locales ubicados en calles y bulevares fueron visitados y los centros comerciales copados por quienes querían aprovechar las ofertas del Viernes Negro, pero comerciantes afirman que, a pesar de la afluencia de personas, no hubo aumento en las ventas.
Dueños de establecimientos de Candelaria detallaron a HispanoPost que el Black Friday implicó más gente que transacciones pese a los descuentos. De igual manera ocurrió en Sabana Grande, donde a pesar que las personas hacían colas para ingresar a las tiendas en pocos minutos salían sin bolsas en las manos.
Sin embargo, la presidenta de la Cámara de Centros Comerciales (Cavececo), Claudia Itriago, detalló que la cantidad de visitantes aumentó, y como consecuencia las calles cercanas a los principales centros comerciales estuvieron congestionadas.
Itriago recalcó que el flujo de personas era por las ventas, debido a que tiendas del Sambil, Lido, el Centro Comercial Ciudad Tamanaco y el Tolón aseguraron que hubo grandes colas para comprar.
Durante ese día, HispanoPost pudo comprobar cómo en el Centro Comercial El Recreo los compradores hacían una fila de dos horas para pagar pantalones en una de las tiendas, pero era el único establecimiento con esa cantidad de clientes.
La Cámara de Centros Comerciales aún no ha hecho pública la actualización de la cifra de visitantes a estos espacios en toda Venezuela y hasta el último reporte del 2019 el número había descendido de 2.700.000 a 1.800.000 personas, en aproximadamente tres años.
Aunque el viernes no registró el aumento esperado por muchos establecimientos, el Black Friday se alargó todo el fin de semana y este tiempo permitió a posibles clientes comparar precios de las ofertas e inclinarse por la más conveniente.
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