Pasan los días y la ciclovía de Río de Janeiro sigue fracturada

    0
    240

    La obra, cuya inauguración coincidió con el encendido de la antorcha olímpica en Atenas y que se iría a convertir en uno de los grandes legados de los Juegos Olímpicos Río 2016, caía pocos meses después de ser abierta abatida por el mar, provocando la muerte de dos ciclistas.

    Un trecho de 50 metros se desplomab0a ante la embestida del mar. Antes del accidente algunos usuarios ya habían advertido el mal estado de la ciclo vía, eran visibles la separación entre las juntas del carril bici, justo en la parte en la que estaba suspendida en el mar.

    A pesar de que el tramo derrumbado por las olas del mar fue reconstruido meses después del accidente, hoy día, un año después del accidente, continúa cerrado al tránsito de peatones y ciclistas, aunque son muchos los que deciden saltar las barreras y circular por el trecho inhabilitado, a pesar del riesgo que puede conllevar hacerlo.

    El pasado 28 de marzo, el Consejo Regional de Ingeniería y Agronomía de Río recomendó la no reapertura del carril bici, en el trecho entre Sao Conrado y Leblon, en la zona sur de la ciudad hasta no tener certeza de la recuperación de la pista y de la firmeza de las estructuras de fijación de la vía. Según los técnicos, no existe hoy día seguridad para que pedestres ni ciclistas utilicen el carril bici, debido a la corrosión de las estructuras y la existencia de fisuras en los bloques de cemento, así como infiltraciones en el suelo y en las juntas de dilatación.

    En este mismo sentido, los técnicos apoyaron la idea de que sea utilizado el período de mayor resaca del mar, entre abril y agosto, para revisar la vía en su totalidad y recomendaron realizar un estudio sobre los efectos climáticos en la estructura, lo que podría demorar hasta dos años para considerar una nueva reapertura.