Un bote de aguas negras en la sala de hemodiálisis del principal hospital de niños en Venezuela, el J.M de Los Ríos ubicado en Caracas, generó que los tratamientos de diálisis de la unidad de nefrología de ese centro asistencial sean suspendidos. Algunas madres, desesperadas, solicitan que les realicen la diálisis a sus hijos, pese al riesgo de contraer una infección.
La preocupación de las madres de los niños que están hospitalizados en ese centro de salud se agudiza con la muerte de Carina Vergara, de 16 años. La paciente falleció el 14 de mayo y es una de las niñas que adquirió una bacteria en la unidad de hemodiálisis del JM de Los Ríos.
Los representantes de estos pacientes con insuficiencia renal denunciaron que en ese hospital no les hacen mantenimiento a los equipos médicos y que, además, hay escasez de las medicinas que sus hijos requieren.
Los padres de los pacientes de la unidad de nefrología del JM de Los Ríos han realizado protestas desde hace varios meses para denunciar la crisis que hay en esa área. Varias de estas manifestaciones se han realizado en las afueras del hospital en horario de la noche.
HispanoPost documenta los testimonios de tres madres que batallan para salvar a sus hijos y, además, logró ingresar al área de hemodiálisis que está suspendida.
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