Irina Shayk y Bradley Cooper ya no viven el sueño de pareja perfecta y feliz. La revista People se encargó de confirmar que decidieron poner fin a su relación, aunque, hasta el momento, ninguno de los dos haya hecho un comunicado oficial al respecto.
No podía ser de otra manera. Luego de aquel final de tema, durante la entrega de los Oscars, cuando él se sentó junto a Lady Gaga, mientras ella interpretaba «Shallow», ya nada fue igual.
Ese coqueteo en vivo y directo y en televisión mundial (solo en Estados Unidos se estima que más de 26 millones de espectadores vieron la ceremonia), la cosa no volvió a ser la misma para la pareja.
Poquísimo se les volvió a ver juntos y, sobre todo, en la actitud amelcochada que habían tenido desde que ofiicalizaron su noviazgo hace cinco años. Amor que dejó como fruto a Lea de Siene, la pequeña hija de ambos de apenas dos años. Se estima que en breve comenzará la disputa legal por su custodia.
Antes de emparejarse, Irina tuvo una tórrida relación con el ídolo portugués Cristiano Ronaldo. Entre rumores de infidelidad de ambos, a los pocos meses se confirmó que la top model estaba saliendo con Cooper, quien acaba de divorciarse de la actriz británica Suki Waterhouse. Previamente había estado relacionado con una bailarina y con la actriz Renée Zellweger.
No son los únicos
Pero esta no son los únicos que terminan mal después de un flirteo sin razón durante una gala de premios. En 2017, Marc Anthony y Jennifer López se dieron un «piquito» en plena ceremonia de los Grammy Latinos, mientras él estaba casado con la modelo venezolana Shannon de Lima. Eso fue algo que no cayó muy bien en los fanáticos, sobre todo, de ella. ¿El resultado? No pasaron muchos días hasta que se anunció su divorcio de la pareja.
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