Su lucha contra la censura chavista le ha costado amenazas de muerte

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    Fernando Pinilla prefiere morir con las botas puestas antes que ceder ante la censura y las amenazas del régimen chavista. Este caricaturista venezolano explica que se inspira en el hambre, la miseria, la falta de seguridad jurídica y otros problemas que deben afrontar los ciudadanos de su país.

    Sus trabajos llevan un sello social con alto contenido político e invitan a una profunda reflexión sobre la realidad. A pesar de la terrible situación económica y social que atraviesa Venezuela, afirma que es necesario un espacio para el humor.

    Pinilla también escribe historias infantiles y recientemente publicó un cuento bautizado “El gato glotón” que deja dos buenas moralejas para los niños: una sobre la consecuencia de los excesos y otra sobre no creer en todo lo que se escucha.