El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llegó a Florida para reunirse con familiares de víctimas y sobrevivientes de la masacre registrada el miércoles en un colegio y que dejó un saldo de 17 muertos y 14 heridos.
Junta a la primera dama, Melania Trump, se dirigieron -en una visita que no había sido previamente anunciada- al Hospital Broward Health North, donde según un funcionario de la Casa Blanca iba a agradecer al personal médico «por su ayuda para salvar vidas», tras la masacre perpetrada el miércoles por un joven de 19 años en una escuela secundaria de Parkland, al norte de Miami.
«Es triste que algo así pueda pasar», señaló el presidente en relación a la matanza en las escuetas declaraciones que dio a los periodistas que lo acompañan, mientras caminaba por los pasillos del hospital, guiado por el cirujano Igor Nichiporenko.
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