Aunque los casos de COVID-19 han venido en aumento en la segunda quincena del mes de mayo, Nicolás Maduro informó a través de los medios de comunicación del Estado que a partir del próximo lunes 1 de junio se activaría un plan en todo el país de flexibilización de la cuarentena, con el fin de ir reactivando los comercios y servicios no esenciales, al igual que las actividades bancarias.
Más allá de este anuncio, el Ejecutivo nacional no ha dado ningún otro tipo de información al respecto y esto tiene en vilo a los distintos sectores empresariales del país, ya que no conocen la propuesta.
Los principales gremios, entre los que se encuentran Fedecámaras, Consecomercio y Conindustria, han presentado planes concretos y ajustados a las recomendaciones sanitarias internacionales para flexibilizar la cuarentena, pero no han sido tomados en cuenta por la administración de Maduro.
Felipe Capozzolo, presidente del Consejo Nacional del Comercio y los Servicios (Consecomercio), indicó que están dispuestos a trabajar de manera conjunta con todos los sectores para evitar la propagación de COVID-19 y también para que la reactivación económica del país sea lo más ordenada posible.
Por tal motivo, puso a disposición de todos cuatro recomendaciones para el retorno progresivo de las actividades laborales, basadas en las normas de seguridad y salud de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
La OIT indica que se deben adoptar medidas de prevención y protección para reducir los riesgos de contagios. Consecomercio, instruido por esta premisa, exhorta a los trabajadores, colaboradores y clientes a mantener una distancia de seguridad, mínimo de 1,5 metros. Por otra parte, el uso obligatorio de implementos de seguridad como tapabocas y guantes. Así mismo, la supervisión de las medidas de higiene, como el lavado frecuente de manos y si no se dispone de agua, el uso de antibacterial con 80% de alcohol. También se deben desinfectar y limpiar las superficies diariamente, comentó.
Insistió en que para garantizar la seguridad de los trabajadores y consumidores es importante evitar las aglomeraciones de personas, por ello es fundamental que las empresas y los comercios controlen el aforo en los espacios cerrados.
Resaltó que las empresas y las cámaras de comercio regionales y sectoriales han desarrollado protocolos específicos de higiene y seguridad para el comienzo de las actividades laborales.
El representante gremial informó que 90% de los comercios se encuentran en la espera de los protocolos de higiene y seguridad certificados por el Ejecutivo nacional. Estamos esperando que nos den la posibilidad de trabajar nuevamente por el país. Los sectores priorizados han realizado un gran trabajo en marco de esta pandemia.
Nosotros podemos integrarnos en una estrategia de país para luchar con Covid-19 y salvaguardar la economía, dijo.
Capozzolo señaló, que es importante el cumplimiento de protocolos y la observancia de los emitidos por la OIT. En Venezuela las medidas de prevención e higiene deben ser certificadas a través de instituciones como el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales (Inpsasel), el Servicio Autónomo Nacional de Normalización, Calidad, Metrología y Reglamentos (Sencamer) y el Fondo de Desarrollo para la Normalización, Calidad, Certificación y Metrología (Fodenorca).
Estamos a la expectativa
El presidente de Fedecámaras, Ricardo Cusanno, afirmó que entre los agremiados existe una gran incertidumbre porque no conocen como será el regreso a esta nueva normalidad económica a la que se refiere la administración Maduro. Por eso comentó que están a la expectativa.
Opina que la noticia de la flexibilización es positiva, porque, a su juicio, cualquier indicio de reactivación económica traerá mejores condiciones para un gran número de empresas que se encuentran claramente afectadas por la cuarentena.
En este sentido, destacó que el Observatorio Digital de la Productividad de Fedecámaras realizó su primer estudio de afectación en el sector privado, producto de la COVID-19 y del estado de alarma decretado el pasado 13 de marzo en Venezuela.
62,83 % manifestó que su empresa no está operativa en este momento, principalmente porque los empleados no pueden llegar a sus puestos de trabajo por problemas de transporte. 29% opera con horario restringido y solo 8,18 % en horario regular. Les preguntamos, ¿cuál es la capacidad de su empresa para permanecer abierta bajo las condiciones actuales? 36% afirmó poder permanecer abiertas de 1 a 4 semanas. Otro 46 %, un máximo de 6 meses. 9% de 6 meses a 1 año y 8 % manifestó poder permanecer abiertas un 1 año o más. 1 % afirmó que solo 1 semana, precisó.
Detalló que más de 55% de los encuestados son empresas que afirman tener entre 5 y 50 empleados; 10,04% de 50 a 100 empleados; 13,75% más de 100 empleados y 17,47% indica tener menos de 5 empleados. Lo que puede significar un aumento de la tasa de desempleo en el país en los próximos meses, en caso de no levantarse la cuarentena de manera adecuada.
Indicó que 85,5% de las empresas consultadas manifestaron tener una afectación entre muy alta, debido a la pandemia por COVID-19, una realidad que solo agrava al ya debilitado aparato productivo nacional y a nuestra economía.
Por otra parte, Cusanno, subrayó que el rol de la institucionalidad privada ha tenido un protagonismo histórico, por lo que resaltó que desde el gremio hoy más que nunca se debe aportar al rediseño del país.
En vísperas de lo que será la transformación económica de este año, luego de reactivar las operaciones post COVID-19 y en medio de la conflictividad política, afirmó que desde la institución se ha planteado el reto de seguir construyendo independencia y autonomía.
Es el momento de cooperar y con templanza y voluntad poder salir adelante. Si entendemos que desde ese punto de encuentro se puede generar retribuciones y cambios importantes al drama que vive la ciudadanía, ahí estará la institucionalidad para procurar esos cambios, finalizó.
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