Exigen al MP investigar agresión a periodistas en Maiquetía

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    Periodistas, trabajadores de la prensa y miembros de la sociedad civil, acudieron este jueves a la sede la Fiscalía General, en Parque Carabobo, y posteriormente se dirigieron a la sede de la Defensoría del Pueblo en Bellas Artes, con el fin de denunciar las agresiones que sufrieron varios equipos reporteriles cuando se encontraban en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía cubriendo la llegada del presidente de la Asamblea Nacional y encargado de la República, Juan Guaidó.

    Marco Ruiz, secretario del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP), afirmó que los organismos que están encargados de impartir justicia en el país deben abrir una investigación y castigar a los culpables.

    “Vinimos al Ministerio Público para denunciar las agresiones contra periodistas y que se ejerzan acciones ejemplarizantes en contra de aquellas personas que generan estos hechos y quienes son victimarios de estos 15 trabajadores de la prensa que resultaron directamente afectados durante esa cobertura. La totalidad estuvo en una situación de vulnerabilidad, porque quien no fue alcanzado por los golpes, por las piedras o por las patadas, estaba escondido, precisamente huyendo de ser agredido y con pocas posibilidades de realizar de manera libre el trabajo que nos toca hacer”, expresó.   

    Rechazó que un alto funcionario del gobierno de Nicolás Maduro haya justificado las agresiones, lo que permite además que los victimarios puedan actuar con premeditación y alevosía, al sentirse apoyados por los jerarcas del régimen.

    “Lo que ha hecho un altísimo funcionario del régimen a través del canal del Estado es incitación al odio, amenazar, chantajear y generar zozobra. Este es un llamado también a la Fiscalía para que investigue a quien utiliza los recursos de todos los venezolanos para incitar al odio”, expresó Ruiz.

    El representante sindical alertó que el régimen lo que busca es callar a los trabajadores de la prensa, que diariamente salen a las calles a levantar las noticias y los hechos que son de interés para la opinión pública.

    “No podemos permitir que Venezuela se quede con periodistas silenciados o sin periodistas. Todos los días los periodistas salen a las calles y se ven amenazados por ejercer su profesión”, agregó.

    Por otra parte, el director de la ONG Espacio Público, Carlos Correa, indicó que este será el primer espacio alternativo para exigir justicia, advirtiendo que si existe omisión acudirán a las instancias internacionales correspondientes.  

    “El Estado no puede eludir su responsabilidad de proteger a los periodistas”, sentenció. Recalcó que es necesario que los gremios se unan “para vencer la impunidad y el acoso a los periodistas”.

    Hablan los agredidos

    Nurelyin Contreras, una de las agredidas por afectos al régimen, relató parte de lo vivido en el aeropuerto de Maiquetía. “Cuando estamos haciendo la cobertura, siento que un hombre me dio un golpe en la mejilla, caiga al piso y lo que veo es a un policía en su moto riéndose de lo que me sucedió en lugar de evitar el ataque a los periodistas”.

    “Tenían cuchillos artefactos de electroshock. A los periodistas no nos pagan nadie del ‘imperio’ y lamento que Diosdado Cabello me haya expuesto en su programa: no fueron extensiones, fue mi cabello. Yo no tengo por qué armar una estrategia porque no me presto para shows. Usted es hombre, tiene una hija joven como yo, recuerde que usted nació de una mujer y las mujeres merecemos respeto”, dijo Contreras.

    Otro de los agredidos que acudió a la Fiscalía fue el periodista Maiker Yriarte Oliveros, quien lamentó que el trabajo de los periodistas no fuera respetado. “Los periodistas somos demócratas y defensores de la libertad de expresión, no somos de un partido político. No somos parte de un show”, insistió.

    “Estamos en una carrera muy vulnerable, pero nos debemos a la gente. Sabemos que la Guardia Nacional no nos defiende, la Policía Nacional tampoco. Recibí muchos golpes en la cara y en la cabeza y por ello tengo un collarín, porque me diagnosticaron latigazos. Los raspones que tengo en mis manos son producto de que me agarré de una reja. Me sentí muy vulnerable porque fueron más de cinco personas que me pegaban”, dijo Yriarte.

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