En su libro Los orígenes del poder político, el politólogo estadounidense, Francis Fukuyama habla sobre el estado de la naturaleza. Aquí desmonta las teorías sobre que el hombre era un ser individual. Hoy sabemos que eso no es cierto.
El genoma humano hoy ha demostrado que los genomas de los chimpancés y los seres humanos se sobreponen en un 99%, es decir, que lo que nos diferencia de los chimpancés es el 1%. En ese 1% está el lenguaje, está, el pensamiento abstracto, las creencias religiosas y por supuesto las diferencias anatómicas.
Los especialistas en primates han estado observando el comportamiento de estos tanto en su hábitat natural como en zoológicos. Hay unos que conforman alianzas para destronar al líder matándolo, mientras que hay otros que resuelven sus problemas a través de la justicia sin violencia.
El comportamiento de los chimpancés es impresionantemente parecido al de los humanos. Pueden funcionar en base a la teoría de juegos, al dilema del prisionero. Incluso pueden apartar de la manada a quien consideren traidor o violento.
Esto es un mensaje para la oposición venezolana. ¿Ustedes quieren seguir comportándose como los chimpancés de las jaulas del zoológico, o quieren utilizar ese 1% que nos diferencia de ellos?. Estoy segura de que ustedes no quieren estar en una jaula.
