El anuncio realizado por Nicolás Maduro el pasado miércoles, de que los inventarios de gasolina dan para 20 días o un máximo de 30 estirándolos, se traducirá en un racionamiento más férreo con énfasis en el interior del país, aseguraron fuentes calificadas del mercado interno de derivados de hidrocarburos.
De acuerdo con los consultados, que pidieron guardar su nombre en reserva, el blanco principal de la medida restrictiva son las estaciones de servicio que venden el combustible a precio subsidiado de 5.000 bolívares el litro.
«Los últimos días el despacho del carburante a los expendios del interior se ha limitado mucho más, al punto de que la venta se realiza tres días a la semana, pues una gandola la reparten entre tres bombas a razón de solo 7.000 litros cada una», explicó un consultado.
Indicó que «el gobierno tiene la esperanza de contar con 10.000 o 15.000 barriles diarios de gasolina aportados por la refinería de Puerto La Cruz, estado Anzoátegui, con la puesta en operación de la unidad catalítica prevista para la próxima semana».
Sin embargo, agregó la fuente, no hay garantía de un suministro confiable e ininterrumpido desde Puerto La Cruz.
Concesionarios de estaciones de servicio subsidiadas de Caracas contaron que desde el fin de semana les han recortado el suministro de gasolina. «Tengo dos días seco porque no ha llegado la gandola y debió hacerlo el fin de semana», alertó el propietario de una bomba en el centro norte caraqueño.
Otro concesionario de un establecimiento del noroeste capitalino refirió: «Los mismos gandoleros nos informan sobre la orden de proveer más a las estaciones de servicio premium, que venden el combustible a 0,50 centavos de dólar el litro».
Las fuentes indicaron que las refinerías El Palito y Cardón -ubicadas en Carabobo y Falcón, respectivamente- siguen presentando graves problemas técnicos que le impiden operar de forma continua y confiable.
«El régimen espera, forzando al máximo las instalaciones, producir gasolina así sea de forma intermitente para contar con algo de combustible extra hasta la víspera de las elecciones del 6D», sostuvo uno de los consultados.
Resaltó que la alternativa de importar gasolina desde Irán se lleva unos 80 días. «Irán destina a Venezuela siempre los mismos barcos para evitar que Estados Unidos le sancione toda su flota. Por ello, debe esperar a que lleguen a puerto iraní los buques del cargamento que Maduro recibió a finales de septiembre», explicó la fuente.
Pura propaganda
Respecto al accidente de este martes en la refinería de Amuay, en el estado Falcón, los consultados manifestaron que la explosión en la torre de vacío, la cual abastece insumos a la catalítica de gasolina de Cardón para obtener gasolina, fue ocasionada por una sobrecarga y reparar los graves daños causados requiere de 2 a 3 meses.
«Lo del sabotaje y el ataque a Amuay con un arma extraña es pura propaganda del gobierno para ocultar su negligencia e ignorancia sobre el manejo eficiente de la industria petrolera, la cual está en el suelo por falta de mantenimiento e inversión durante años», denunció una fuente.
Recalcó que con el racionamiento extremo de gasolina «Maduro persigue suministrar solo 40.000 barriles diarios al mercado interno, volumen muy por debajo del consumo nacional de entre 80.000 y 100.000 barriles al día».
Sobre el abastecimiento de diésel, las fuentes indicaron que hay inventarios suficientes para atender la demanda nacional de 40.000 barriles por día.
Asimismo, señalaron que los inventarios de kerosina o combustible de aviación están en niveles suficientes para cubrir la demanda del sector cuando el Ejecutivo autorice la reanudación de los vuelos.
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