Simón Zerpa, un joven ministro que llegó a presidir el despacho de Finanzas y que se ganó la confianza de Nicolás Maduro por sus diligentes manejos con los fondos chinos y sus excelentes relaciones con ese país asiático, fue removido de su cargo. Su nueva misión es presidir el Banco Bicentenario, entre otros entes financieros públicos venidos a menos. Le sustituye la vicepresidenta de la República, Delcy Rodríguez, un movimiento que, según fuentes cercanas a Finanzas, forma parte de una estrategia tejida en Fuerte Tiuna.
La movida corresponde a una necesidad de la administración de Maduro de destrabar las complicaciones que enfrenta el Ministerio de Finanzas con la presencia de Zerpita (como se le llama a Zerpa), por estar sancionado por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, lo que ha dificultado cualquier tipo de relación comercial incluso con aliados de Maduro.
Existe también una segunda versión que corría desde ayer en los pasillos de Finanzas. Se trata de la presunta vinculación de Zerpa en los negocios del empresario colombiano Alex Saab, detenido actualmente en Cabo en Verde.
El nombramiento de Delcy Rodríguez en el despacho de Finanzas marca un hito en los últimos 20 años, por ser la primera mujer en representar ese despacho. Matiza Izaguirre fue la última ministra de Finanzas nombrada por el presidente Rafael Caldera y ratificada por unos meses, cuando Hugo Chávez llegó al poder.
Uno de los objetivos de la presencia de Rodríguez en Finanzas es levantar el perfil internacional de ese despacho, no solo en el área comercial sino también jurídica, señaló una fuente cercana al entorno del gabinete económico. Se especula que las sanciones impuestas a la ahora nueva ministra podrían ser desestimadas por la Unión Europea y convertirse en una figura clave para la formación de pactos y de avances en negociaciones muy puntuales a partir de ahora.
En lo que corresponde al Banco Central de Venezuela, una fuente del ente emisor que prefirió mantenerse bajo la reserva aseguró que Calixto Ortega (Calixtico, como también se le llama) sería ratificado y que haría llave con la nueva ministra Rodríguez, con quien mantiene buenas relaciones.
Maduro, por su parte, completa así un tablero de ajedrez al que ya pertenecía Tareck El Aissami, como ministro de Petróleo, y que, según se pudo conocer, ha representado un «alivio» (asegura la fuente), pues ha conseguido colarse dentro de las simpatías de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), cartel donde el antiguo ministro Manuel Quevedo era muy mal visto.
El presidente de Petróleos de Venezuela, Asdrúbal Chávez, enfrenta el problema de la escasez de gasolina desde la refinería Cardón, tratando de levantar la producción y suministro de combustible.
Si bien, aún Delcy Rodríguez, está encargada de la vicepresidencia de la República, una fuente cercana a Fuerte Tiuna señaló que la idea es que sea sustituida por el actual ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López, lo que correspondería a una movida audaz por parte de Maduro para impulsar una transición ordenada, lo que se convertiría en todo un jaque mate.
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