Secuestro y tortura de mascotas junto a detenciones de allegados y familiares de políticos y militares forman parte del nuevo esquema de persecución en Venezuela, denunciaron abogados y defensores de los derechos humanos.
La aprehensión de Juan José Márquez, tío del presidente encargado de Venezuela y de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, es el más reciente caso de lo que juristas denominaron como modus operandi contra quienes piensan distinto.
Es una práctica que se está llevando a cabo con los militares y presos políticos, es una política de Estado afirmó la abogada Theresly Malavé.
Detalló que en el caso del allanamiento de la casa de Angela Expósito se llevaron varios animales y no se sabe dónde están. Expósito es proteccionista, está detenida en el Helicoide desde septiembre de 2018 y es señalada de cuidar mascotas de presos políticos.
Malavé refirió que las fuerzas de seguridad del Estado se llevaron unos perros del coronel Oswaldo García palomo, preso desde hace más de un año. Está rodando una información de que degollaron a Bam Bam, un Golden Retriver de uno de los presos políticos. A las mascotas se las llevan, las matan o las desaparecen, no se sabe dónde las tienen, denunció.
Dijo que el objetivo de estas actuaciones es torturar para obtener información.
Joel García, abogado del tío de Guaidó, manifestó que atacar al entorno de los políticos es una práctica recurrente. Les dan por las partes débiles, las personas más allegadas a Juan Guaidó.
Si no te consigo a ti me llevo a tu hermano, a tu mamá. Hace poco se llevaron a un niño de 8 años también, dijo. Agregó que en el caso específicamente de Juan José Márquez, el año pasado a raíz del 30 de abril, Cristopher Figuera (exjefe del Sebin) dijo que Maduro le ordenó detener a la mamá de Guaidó, a lo que se negó y Maduro le dijo: Mete preso a cualquiera, mete preso a Roberto Marrero, y por eso le sembraron las armas.
Recordó que Marrero, al igual que Márquez, fue aprehendido en el momento en que Guaidó estaba de gira fuera del país.
El abogado Omar Mora Tosta explicó que la detención de Márquez es una retaliación y forma parte de la arbitrariedad del régimen.
El caso del tío del presidente Guaidó evidencia que es un montaje. Las autoridades de Portugal se han pronunciado acerca de los explosivos y viajar con eso es imposible. Es retaliación con móvil político, aseguró.
Destacó que en un país donde las instituciones son manejadas por el Ejecutivo del régimen no hay posibilidad de que los ciudadanos estén protegidos.
No hay ningún tipo de protección salvo el sentido común, el sentido de supervivencia y medidas seguridad de las personas. Tenemos más de 500 presos políticos civiles y militares a quienes se les ha violado los derechos humanos y no hay a quien acudir porque todo opera en concierto para perseguir a la disidencia, a quienes piensan distinto, puntualizó Mora Tosta.
Por su parte, García reveló que la esposa y familiares de Marquez acudieron a la sede de la Dirección de Contrainteligencia Militar (DGCIM), donde se encuentra recluido, y les informaron que no puede recibir visitas en un lapso menor a 30 días, tampoco tenemos acceso los abogados.
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