Un artista de Maracaibo humanizó a las guacamayas de Caracas

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    Carlos Luis Sánchez es un artista plástico nacido en Maracaibo y egresado de la Universidad del Zulia, pero arrastra consigo un legado andino porque sus padres son tachirenses, escogió la ciudad de Carora para vivir y desarrollar su obra y se ha dado a conocer en redes sociales porque humanizó a las guacamayas caraqueñas con unas máscaras.

    Estas representaciones no se limitan para la sola contemplación, sino que forman parte de una performance o representación teatral. Incluso, varios de sus trabajos están acompañados por sus propias composiciones musicales como es el caso de “Las guacamayas de Caracas son diabéticas”, la cual tiene su video que combina sus pinturas animadas y con personas llevando la máscara del ave.

    “Es una canción en la que habló de las guacamayas de Caracas, de cómo se han vuelto adictas al dulce porque las personas se lo dan y hago la metáfora que padecen de diabetes”, dice el artista al sumarse a la cruzada de biólogos que exhortan a no alimentar a estas aves que ya son símbolos de la ciudad.

    En su trabajo incluye máscaras de otras especies que son simbólicas de la fauna venezolana como el chigüire, que también tiene su canción inspirada en un texto del escritor tachirense Luis José Glod ; la de un chivo, que es un animal que se cría en Carora y que le ha servicio para narraciones orales de poetas del estado Lara; y está la de un guácharo -que recibió un premio de la Embajada de Alemania- que hizo para celebrar el nacimiento de Alejandro de Humboldt, quien fue el explorador que estudió estas aves.

    “La fauna venezolana es importante en mi trabajo y siempre quise llevar mi pintura más allá de lo bidimensional como es a lo narrativo. Por eso hice comics con los personajes de mis pinturas, compuse canciones inspiradas en ellas y eso me llevó a crear máscaras para que la pintura se volviera real”, explica.

    Su cuenta en Instagram @majenye proviene de la palabra homónima propia de la comunidad indígena de los Yukpas, que viven en la sierra de Perijá, para denominar a la pipa para fumar que tiene esta etnia.

    En un apasionado de las películas del cineasta franco chileno Alejandro Jodorowsky y tiene un monólogo inspirado en la tonada de Simón Díaz llamada “Mercedes”, pero bajo la versión que la caimana fue víctima de un acto de celos.