Vecinos trabajan en equipo para alejar el COVID-19 de los edificios

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Una de las pocas cosas positivas que ha dejado la pandemia del coronavirus COVID-19, es que ha enseñado a las personas a pensar en colectivo; conocerse y unirse de pequeñas a grandes comunidades sobre la base del sentido común. Una de las consignas que más se escucha en estos días de cuarentena es: “Protegerte es proteger a los demás”.

Por lo que, la pregunta es cómo protegerse de una enfermedad tan agresiva, que amenaza sin distinción de edad, sexo o posiciones sociales, a 187 países del mundo, sin comenzar desde el epicentro propio de actividades, es decir, desde la casa o el apartamento.

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Elías Santana, vocero comunitario y director de Radio Comunidad, comentó que desde la plataforma MiCondominio.com se ofrece una guía con 4 líneas de acción, basadas en la seguridad, prevención, solidaridad y convivencia, que pueden ser ejecutas por los vecinos para protegerse y actuar en equipo de cara a las consecuencias del COVID-19.

“Creemos que esta es una situación que se extenderá por unos meses más, por lo que es importante que los vecinos se unan y refuercen sus medidas de seguridad”, dijo Santana. “Es aconsejable que desde el condominio del edificio se realice un censo por apartamento, en el que se debe conocer los datos personales de cada habitante, su profesión, oficio y dónde trabaja; muy especialmente si alguno de los miembros de la familia tiene algún padecimiento o condición especial que requiera atención médica y especializada”.

Por ello, invitó a los venezolanos extremar las medidas de seguridad. “Han sido dos semanas complicadas, pensamos que puede ponerse peor. Podrían venir situaciones complicadas de orden público, inseguridad o desabastecimiento. Es importante que el condominio revise alambrados y cercado eléctrico, accesos al edificio, iluminación y establecer canales de comunicación directa con los vecinos. También es importante estrechar lazos con vecinos de otros edificios ante cualquier eventualidad hay que estar informados”.

“Yo crecí en una conserjería y mantengo una visión comunitaria de la vida como propietario”, narró Alejandro, un obrero de 23 años de edad. “Hoy vivo con mi esposa en Bello Monte, en un edificio pequeño. Al principio fue complicado porque la mayoría de mis vecinos siempre están viajando. Son solo tres pisos de dos apartamentos cada uno, era importante y necesario que nos ayudáramos entre todos, porque no hay vigilantes ni conserje. Así que ahora el jefe de cada familia tiene la misión de proteger al resto como si fuéramos una gran familia en apartamentos separados”.  

La principal arma para vencer al coronavirus, que se propaga a gran velocidad y muy fácilmente, es la prevención, por lo que Santana resaltó que lo aconsejable es estar equipados en cuanto a productos de limpieza y kits de bioseguridad: “No queremos que alguien arriesgue su vida por nosotros. Por eso, como condominio es importante mantener equipada a la conserje. Hay que suministrarle sus tapabocas y guantes, así como los productos de limpieza que necesite”.

Yolanda, una ama de casa que vive en una habitación alquilada en Coche, contó: “Yo tengo mucho tiempo viviendo aquí, mis arrendatarios son como mi familia sobre todo desde que mi hija emigró. En el edificio no tenemos conserje, pero entre todos los apartamentos se estableció una hora para sacar la basura y la limpieza de los pasillos se turna entre los cuatro apartamentos de cada piso. Yo generalmente paso un coleto con cloro a las escaleras y el ascensor para colaborar un poco más”.

La convivencia es clave

En cuanto a la importancia de la convivencia, Santana aseguró que es necesario establecer un ambiente fraterno entre todos. Considera que, para ello, es de mucha ayuda la información obtenida a través del censo. “Es importante para conocer cuáles son los vecinos que están dispuestos a colaborar ante una situación de emergencia o de rutina. Hay que combinar los canales de comunicación, porque hay vecinos que no manejan herramientas digitales”.

Hernández es un hombre de unos 60 años de edad, reelecto presidente de la junta de condominio de un edificio de Sebucán. “A través del chat de Whatsapp y correo electrónico siempre informamos lo que pasa en el edificio y sus alrededores. Tenemos una dinámica en la que nos avisamos cuando hay peligro y cómo podemos resolverlo. Recientemente se dañó el sensor del estacionamiento y cada noche hay una persona encargada de colocar el candado y estar pendiente de si algún vecino tiene una emergencia”.

Sobre la solidaridad, Santana hizo un llamado a los vecinos. “Tuvimos el caso de un inquilino en El Marqués Norte que invitaba a sus vecinos a tardes de entretenimiento en la planta baja del edificio. Él alegaba que estas actividades subían las endorfinas y los prevenía del virus. Entendemos la buena intención del señor, pero en estos días no podemos reunirnos ni mantener contacto con otras personas y los que más estaban bajando eran los viejitos. Los vecinos nos pidieron intervenir en ese caso”.

Resaltó que en la página MiCondominio.com se puede conseguir un software que permite hacer asambleas a distancia: “Muy importante es un ambiente de convivencia con nuestros vecinos, no quedarnos solo en lo negativo”.

Adrián, un joven ingeniero que vive en Palo Verde, contó que hace unos cuatro años se mudó a uno de los edificios más altos de la zona. “Yo paso mucho tiempo en la calle, trabajando. Esta es una torre muy grande, se podría decir que solo conocía a mi mamá y hermana, que son las que más tiempo están en casa, pero en estos días de cuarentena he aprendido mucho de mis vecinos. Sé que la mayoría son adultos mayores y me he ofrecido a ayudarlos con las compras para que no tengan que salir o con las cosas que tengan que hacer en la computadora, como cobrar la pensión o los bonos de Maduro”, detalló.

Santana concluyó que desde el condominio de cada edificio debe tener conocimiento de los contactos del hospital centinela más cercano; así como mantenerse cercano a las autoridades policiales de cada cuadrante. “No es tarea del vecino agarrar el carro y trasladar al paciente sospechoso de coronavirus hasta el hospital. Su tarea es comunicarse con las autoridades, informar el caso y seguir las indicaciones”.

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